Una vergüenza

Este fin de semana se suspendieron las funciones de Romeo y Julieta en el Real. ¿La razón? Uno de los protagonistas pidió carpeta médica. Gabriel Coba, para ser más precisos, nada menos que el propio Romeo. Eso es normal. El chico es humano y puede enfermarse (y no sean socarrones, no es que se enfrió por el desnudo que hace al final... creo).
Lo que no es normal es que no exista un reemplazo, cover, alternante, suplente o como quieran llamarlo. A ver, la Comedia Cordobesa es un cuerpo estable oficial, formado por actores concursados que marcan tarjeta, pues a fin de mes reciben un sueldo. Es decir, un grupo profesional, no un grupo independiente donde a gatas que se llega a cobrar cincuenta pesos por función (en el mejor de los casos) y donde no está prevista la preparación de un suplente que salve las papas en el momento. Pero tratándose de un cuerpo oficial... Es indignante.
Yo digo: si no hay dentro de la Comedia otros actores cuya edad concuerde con la del adolescente italiano, ¿por qué no buscaron en el Seminario Jolie Libois, el tan mentado "semillero"? O en su defecto, en la Roberto Arlt, también dependiente de la provincia. O actores independientes, tal vez.
La conclusión es triste: el Real puede haber cambiado la fachada (y luce espléndido); pero parece que hay cosas que jamás cambiarán.

PD: cuando ví esta foto me alegré, pensando que era el reemplazo de Romeo. Pero no. Es un actor del musical francés Roméo et Juliette, que luce un vestuario muuuuuuy parecido al del Romeo cordobés.